Un cuadro con una pincelada que denota una gran destreza y una fuerte personalidad, con un muy instruido sentido del color, que logra destacar la grandeza de la sencillez y la naturalidad, mediante una utilización que, a simple vista, se nos muestra como un poco torpe o rústica, pero que en realidad esconde sus encantos más sublimes para aquellos que sepan y que puedan ver un poco más allá.
Comparto íntegramente la opinión de mi colega. A mi entender, esta obra es, sin duda alguna, una de las más enigmáticas e intrigantes que me ha tocado ver en lo largo de mi vida. Esa lectura del mundo tan espontánea y desprejuiciada me resulta sumamente atrapante, realmente inspiradora. Mis más sinceras felicitaciones
Tengo que confesar que yo también he sucumbido inexorablemente ante los místicos encantos de esta pintura. Y considero que intentar agregar algún comentario más ya sería caer en la redundancia lisa y llana; así que creo que sólo me resta sumarme a los elogios y las felicitaciones antedichas, y despedirme cordialmente de usted. ¡Salud, compañero!
Un cuadro con una pincelada que denota una gran destreza y una fuerte personalidad, con un muy instruido sentido del color, que logra destacar la grandeza de la sencillez y la naturalidad, mediante una utilización que, a simple vista, se nos muestra como un poco torpe o rústica, pero que en realidad esconde sus encantos más sublimes para aquellos que sepan y que puedan ver un poco más allá.
ResponderEliminarComparto íntegramente la opinión de mi colega.
ResponderEliminarA mi entender, esta obra es, sin duda alguna, una de las más enigmáticas e intrigantes que me ha tocado ver en lo largo de mi vida. Esa lectura del mundo tan espontánea y desprejuiciada me resulta sumamente atrapante, realmente inspiradora.
Mis más sinceras felicitaciones
Tengo que confesar que yo también he sucumbido inexorablemente ante los místicos encantos de esta pintura. Y considero que intentar agregar algún comentario más ya sería caer en la redundancia lisa y llana; así que creo que sólo me resta sumarme a los elogios y las felicitaciones antedichas, y despedirme cordialmente de usted.
ResponderEliminar¡Salud, compañero!